(DES)PROPÓSITOS PARA EL AÑO NUEVO (II).
Por el noi de la metanoia
Mirar por dónde voy,
saber bien el terreno que piso
para poder tropezar de nuevo,
(tropezar más, tropezar mejor).
Aparentar ser genuino,
esforzarme en ello.
Disimular sinceramente.
Dar sentido a las cosas
lentamente, como la buena cocina.
Existir, pero sin exagerar.
Disfrutar del silencio, de la tranquilidad,
como un signo de riqueza,
o de elegancia, mejor.
Hacerme donante
de mis carencias.
Ser tóxico donde necesiten veneno.
Ser amable donde no lo necesiten.
Completar la geometría del abismo
(o, al menos, un mapa detallado).
Escribir mi biografía
prescindiendo de los hechos.
Dejar de copiar a Pessoa
(o copiarles más, copiarles mejor).
Dejar de repetirme:
“Dejar de repetirme”.
Manifestarme, indignado,
en mi interior.
[Escribir en la pancarta:
“Por una íntima resistencia”].
Adquirir más experiencia
cuando bajen los precios.
Ir a las reuniones de Poetas Anónimos
y confesar, en público,
que no tengo nada que decir
(y aún menos que rime bien)
Amén.